SALTA por el VINO:  

HOTEL DEL VINO  SALTA: es el primer hotel temático de vinos ubicado en el corazón de la ciudad de Salta, a metros del paseo Balcarce. Cada habitación es única y lleva el nombre que caracteriza su decoración, como la suite Torrontés, Cabernet o Malbec, entre otras. Algunos servicios del hotel: Copa de bienvenida - Business Center - Solarium y parques verdes - Wine bar - Desayuno buffet - Piscina climatizada e iluminada – Vinoteca.

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HOTEL ASTURIAS CAFAYATE: categorizado como 3 estrellas, posee una ubicación privilegiada, a tan solo 50 metros de la plaza principal, muy cerca de la Iglesia Catedral y el Museo del Vino. Desde la terraza se tiene una visión magnífica de cerros y viñedos característicos de la zona de los valles calchaquíes. Posee Piscina, solarium parquizado, pileta para niños. El sector de la piscina, cuenta con reposeras para tomar sol, sombrillas, mesas y está rodeada de un amplio parquizado, es uno de los atractivos más buscado por nuestros huéspedes. El Spa cuenta con un circuito hídrico, sala de masajes, sauna seco, sauna húmedo y ducha escocesa. En la planta baja cuenta  con un cómodo gimnasio.

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HOTEL PATIOS DE CAFAYATE: Ubicado en la entrada del pueblo y sobre la legendaria ruta 40, Patios de Cafayate Wine Hotel, ofrece al visitante un lugar sereno para descansar y disfrutar del entorno mientras lo reciben con una copa de un exquisito torrontés o una fresca limonada. Un camino rodeado de viñedos conduce a la entrada, al cruzar su imponente portón, su jardín y añosos árboles dan amparo al sol del norte. El caso original del hotel data de 1892. Grandes puertas de hierro, cerámicas, adobe, mayólicas, aguayos, tapices y muebles con historia acompañan los ambientes, logrando espacios pensados para descansar, leer y conectarse con este lugar maravilloso. Los seis patios con sus galerías, el pequeño oratorio con la imagen de la Virgen de la Rosa, y reliquias que llegaron desde Cuzco, hacen de este hotel, un lugar único y verdadero con la esencia de este pueblo de altura y vinos.

Cuenta con 32 amplias habitaciones, cuyos colores de sus interiores y decoración clásica, atraen y alegran. Galería, Jardín, Colonial y Suites son los distintos nombres con los que se las identifican. Sus ventanales permiten tomar contacto con el exterior, escuchar el sonido de los pájaros y sentir la brisa. Afuera, un verde que contrasta con el desierto y el colorido de las montañas rojizas. El césped se funde un poco más allá en viñedos. Atardecer apacible al borde de la pileta mientras los colores del paisaje van cambiando de tono, hasta cerrarse la noche bajo un brillante cielo estrellado.

El Restaurante del Hotel, La Rosa, acerca una propuesta innovadora para sumar a la experiencia. Sus cocineros de trayectoria internacional nos sorprenden con platos creativos y modernos elaborados con sabores y elementos de la zona y de la propia huerta. La quínoa, rica en proteínas, carne de llama, los coloridos vegetales tan característicos de noroeste argentino y el infaltable vino acompañando e integrando algunos de los platos, son sus principales componentes. Se destaca también su pastelería y panadería de producción casera. En la cava, cuenta con vinos de la propia Bodega El Esteco, además de una gran variedad de etiquetas. Su historia está muy asociada a la tradición vitivinícola, que en este lugar llegó en el año 1870 de la mano de David Michel y su esposa Gabriela Torino. Instalados en Finca “El Puerto” criaron a sus cinco hijos de apellido Michel Torino. Una familia de tradición ganadera que incursionó en la aventura de la vitivinicultura. Fueron grandes pioneros en la materia. Gabriela, al fallecer su marido, siguió adelante con energía y convicción. Anexaron la finca El Recreo y luego su hijo David Michel Torino, sumó la Finca La Rosa en 1925. Fue en 1998 que la casa de campo de La Rosa abrió sus puertas al turismo con 5 habitaciones. Luego ya en manos de otra familia, la casa fue ampliada por el reconocido arquitecto Mariano Sepúlveda, que con su creatividad supo guardar y conservar el estilo de la casa original, manteniendo la auténtica arquitectura del Norte con su influencia colonial.

El Hotel hoy cuenta con 32 habitaciones bien amplias que se dividen en cuatro diferentes categorías según orientación y tamaño.

Las habitaciones Galería (34 m2) tienen vista a los jardines, 4 de ellas se encuentran en la parte más antigua de la casa. Pueden ser armadas Twin o matrimoniales King size. El hotel tiene una habitación preparada para personas con movilidad reducida con un baño adaptado con puerta más grande y ducha. Tener en cuenta que para acceder a algunos lugares comunes hay desniveles de uno o dos escalones.
Cuentan con: Escritorio; Teléfono inalámbrico; Televisión por cable; Secador de cabello; Minibar; Control de temperatura individual; Caja de seguridad en la habitación; WI-FI y Agua mineral de cortesía.

Sin lugar a dudas el hotel ofrece al huésped la experiencia más auténtica de la propuesta de Cafayate como destino. La presencia imponente de la Bodega por su historia y el prestigio de sus vinos, los antiguos viñedos que rodean al hotel, la arquitectura tan propia de la zona, y el interminable paisaje de colores, lo transforman en una opción imperdible para descansar e ir descubriendo lugares que parecen escondidos a simple vista del viajero.

El solo recorrido de los diferentes patios y livings es el comienzo de una estadía placentera. A disposición de los huéspedes se encuentra la sala de juegos, diferentes espacios para distenderse, leer y disfrutar de la calma. Los jardines, la pileta, lugares para relajarse y disfrutar del aire seco de estas latitudes. También hay bicicletas a disposición para recorrer los viñedos y el pueblo. Degustaciones y cursos de cocina son posibles de organizar a pedido. La Bodega El Esteco, ubicada en la misma propiedad que el hotel puede ser visitada. Sus vinos podrán ser degustados durante las comidas en el restaurante del Hotel. Una bodega con mucha historia y que ha ganado importantes mercados en el mundo.